¿Cuándo fue la primera vez que te contaron una historia? ¿Cuál fue el primer cuento que oíste? ¿Cuándo contaste tú por primera vez algo y te sentiste especial? El ser humano ha sentido siempre la necesidad de contar, lo que ve, lo que percibe, lo que interpreta, lo que siente… lo que sea. Cuenta con gestos, hablando, moviéndose, pintando, cantando… como sea.
“Recuerdo muy bien cuál fue mi primera mentira artesanal, mi primera historia, mi primer cuento. Y aún siento la necesidad inmortal e insaciable de mantener los ojos y los oídos de la gente enganchados a mis palabras, a mis gestos, a mis canciones, a mis letras… a lo que sea. Porque al fin sé quién soy, por fin puedo dejar de buscar libros de autoayuda, al final me he descubierto como quien realmente soy. Soy un contador. Y no puedo parar de contar. No voy a parar de contar… lo que sea, como sea, a quien sea.”
Vengan a que les cuente.Tras una fructífera trayectoria como Ofú-teatro, en la que producen montajes tanto infantiles como para adultos, Paki Díaz y Rafa Castillo-Romero deciden dar un giro a la compañía y el primer paso será cambiar el nombre: La Perrera.
Mantienen en cartel su último espectáculo, “Amén, amén”, en el que abordan el mundo del catolicismo con un constante ritmo satírico. Este montaje, a caballo entre el humor y la crítica, les sirve de puente hacia esa nueva visión que comparten de la “nueva” compañía. Luego le sigue la obra “Pero no demasiado” en la que nos muestran una sociedad futura que deshumaniza la sanidad, un paisaje cruel pero desde el humor desconcertante.
Los dos espectáculos para el público más joven serán “Manuela, la koala”, una fábula que ahonda en la igualdad entre géneros, y “Dadadá”, una pieza dadaísta para bebés de 0 a 4 años, llena de sensaciones, emociones, música, tacto, etc.